Ayer se celebró el taller mensual de REDflexión y la organización corrió a cargo, esta vez, de Lola Díaz-Salado, responsable de TIC en la Coordinadora de ONGD. Hay que darle la enhorabuena por haber invitado a Igor Sádaba, profesor de Sociología en la Universidad Complutense de Madrid y uno de los coordinadores del libro Cultura digital y movimientos sociales.
Igor hizo una exposición sobre la historia de la Tecnología y movimientos sociales desde los años 60 hasta la actualidad. Un recorrido que es muy necesario conocer para saber en qué momento nos encontramos. No voy a dar detalles ahora de la exposición, porque afortunadamente en la web de REDflexión colgarán en los próximos días la presentación de Igor, que por sí sola servirá para hacerse una buena idea de este recorrido histórico.
Pero apunto algunas reflexiones que me surgieron durante esta presentación:
Las tecnologías definen tipos de relaciones sociales, ¿o es al revés? Es cierto que la irrupción de inventos como la electricidad, el motor, etc, han sido determinantes, en buena medida, en las relaciones sociales.
Pero imaginemos que en los años sesenta los militares norteamericanos no hubiesen inventado Internet. Posiblemente se hubiese inventado en otro entorno, lugar... o se hubiese inventado algo similar por la propia demanda de la sociedad.
Por supuesto, no deja de ser una hipótesis que, para demostrarla, se necesitaría toda una tesis doctoral.
Durante el foro hubo una palabra que se repitió, a mi parecer, demasiado a menudo y me parece preocupante: Miedo.
Miedo a que el mundo virtual absorba o elimine las relaciones sociales que se producen en el mundo real. Creo que es un temor infundado, pero si existe, hay que hacerle caso, hay que ver por qué existe ese temor.
Creo que, como suele ocurrir ante fenómenos nuevos y rápidos, es cuestión de buscar un equilibrio, y la propia sociedad se suele encargar de encontrarlo. Equilibrio entre la tecnofobia (desechar el entorno virtual) y la tecnofilia (desechar el mundo real).
La exposición de Igor también me hizo recordar numerosas lecturas que tengo pendientes, como Multitudes inteligentes, de Howard Rheingold, o las últimas obras de Geert Lovink.
Las sesiones de REDflexión serán, en principio, los últimos miércoles de cada mes, aunque puede variar en función de los ponentes. Pero os podéis suscribir su blog para recibir las convocatorias, yo por mi parte me comprometo a anunciarlo como hasta ahora por el twitter.
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